Consagraciones en Donostia: 5 fraternos dan el paso de su Sí Definitivo a María en las fraternidades

El último domingo de septiembre, las Fraternidades Marianistas de San Sebastián celebran su fiesta de las Consagraciones. Y este año fue una celebración especial por varios motivos: fue la primera vez que celebramos la fiesta en la nueva capilla del colegio; a diferencia del año pasado, no tuvimos que celebrarla en una especie de clandestinidad por aquello de no sobrepasar límites de aforo; y especialmente, fue una celebración muy intensa y vivida porque 5 fraternos dimos el paso de la Consagración Definitiva.

Como viene siendo habitual, la tarde del sábado celebramos una Gran Fraternidad. Tras una breve oración en el oratorio de Secundaria del colegio, iniciamos una reflexión en torno a cómo hemos vivido la fe durante todo el tiempo reciente de confinamientos y restricciones, tanto a nivel personal como comunitario. Primero por parejas, luego juntándonos en grupos de 4 y así sucesivamente hasta juntarnos todos los presentes.

Tras un tiempo libre aprovechado para ponernos todos al día, la segunda parte fue una mesa redonda en la que 4 de los 5 fraternos que dábamos el paso a la Consagración Definitiva compartimos con el resto de fraternos qué suponía para nosotros el paso que íbamos a dar al día siguiente y cómo habíamos vivido nuestra trayectoria en las FF.MM. desde los primeros días hasta la actualidad. Teníamos cierto temor los 4 al pensar que teníamos hora y media para hablar, pensando que nos iban a sobrar muchísimos minutos. Pero la verdad es que se nos quedó corto y fue muy enriquecedor para todos, tanto para nosotros como para el resto de los presentes, algunos ya Consagrados Definitivos y otros no. El encuentro concluyó con una cena en el mismo colegio.

Y llegó el domingo Con mucha ilusión preparamos durante los días previos las lecturas, los cantos y demás. Entre las varias lecturas que nos gustaban, elegimos la de los discípulos de Emaús. Fue una ceremonia muy emotiva, presidida por el Asesor Provincial, Rafa Iglesias SM, y con la presencia de la Responsable Provincial, Begoña Marín, además de muchísimos fraternos, familiares y amigos, en algún caso venidos de lejos, que nos quisieron acompañar en este momento. Izaskun, Fernando, Alejandro, Gacelo y yo pronunciamos la fórmula de la Consagración Definitiva con mucha emoción.

La celebración finalizó con un pequeño aperitivo en el colegio, donde pudimos encontrarnos todos los asistentes en un momento más distendido. Me faltan palabras para agradecer a todos los que nos acompañaron ese día tan importante para nosotros. Un cristiano sin comunidad no es casi nada, y el pasado fin de semana quedó demostrado que la Comunidad Madeleine de Donostia goza de muy buena salud.