Nova bella. Chaminade y el «Novum»

Él fue testigo de un mundo nuevo, surgido de la Ilustración y la Revolución. ¡Estamos en un mundo tan nuevo! decía él. Y continuaba: Estoy en Francia como en tierra extraña. Casi no sé qué decir ni qué hacer. Me encuentro a la espera de que los acontecimientos se me presenten, más que adelantarme a ellos. No tengo más política que acudir diariamente a la Santísima Virgen (Cartas, nº 575). Estamos acostumbrados a pensar que fue la Revolución de 1789 la que inició ese “novum” en Francia y Europa… Pero no debemos olvidar que ese “novum” ya lo inició la Ilustración. Las 61 nuevas cartas de los hermanos Chaminade descubiertas causalmente por internet hace cuatro años, nos muestran a José Chaminade como un joven profesor de ciencias, posicionándose como defensor de la ciencia moderna que está naciendo. Leer estas cartas cuando los Chaminade tenían 25-28 años, ha sido asombroso. Hemos podido leer y enterarnos de lo que pensaban y cómo formaban (Leerlas en “Cartas de Mussidan” en biblioteca.familiamarianista.es). ¿Qué profesor de nuestros colegios actuales hace como los Chaminade en Mussidan, conectados por carta continuamente con los correspondientes de la Academia de Arras, debatiendo sobre ciencias y letras? Y sabemos que Luis Javier Chaminade tenía la «Enciclopedia» en su biblioteca. Si, si, la de Diderot-D’Alembert. ¿Eran enciclopedistas los Chaminade? ¡Cuantas cosas nuevas estamos aprendiendo sobre ellos.

La Revolución se llevó por delante el colegio de Mussidan, pero ahora con este descubrimiento extraordinario, ya sabemos que eran unos “ilustrados”. Católicos, pero ilustrados, abiertos al novum cultural y preparados para un novum eclesial.  El Terror en Burdeos lo acosó, pero él pudo resistir apoyando a la iglesia clandestina con realismo y valentía. Y reaccionó como un profeta de lo nuevo. Sus fundaciones están marcadas por una nueva manera de responder, de entender la comunión eclesial, de estar en misión. Fue un visionario de lo nuevo. Al obispo de Agen Jacoupy, que estaba desconcertado por las apuestas nuevas del fundador, le contestó: Si se me pregunta hoy por qué se ha preferido un nuevo Instituto antes que muchos otros ya experimentados, respondo que la Historia de la Iglesia nos muestra que siempre se ha actuado así después de las tormentas que han conmocionado a los institutos en distintos tiempos… La causa de esta manera de proceder no es el espíritu de novedad por la novedad; la causa está en las nuevas relaciones que las luces y el siglo que se trata de santificar tienen con las Instituciones correspondientes que les pueden ofrecer la santificación. Una Institución nueva es apropiada a los tiempos, a los lugares, a las circunstancias; no necesita seguir algunas de las costumbres antiguas de los viejos Institutos, pero sí necesita todo lo que tiene relación con nuestras costumbres actuales y que no estaban en los piadosos institutos. El Espíritu de Dios no cambia para nada en todo esto; pero muestra que su influencia es universal, y que él sabrá llegar a todos los hombres, a pesar de la diversidad de los espíritus y de las costumbres de los distintos tiempos. (Cartas n º 85. 20 enero 1817, el año que nació la SM). ¡Menuda carta!

Este Novumde Chaminade está afirmado incluso con frases que son lemas. Por ejemplo, «Nova bella» es un lema marianista que conocemos de siempre: A tiempos nuevos, métodos nuevos. Dios elige una nueva forma de combatir, nos pide nuevas estrategias. Otro lema. Acabamos de publicar un libro de David Fleming, religioso sm de Estados Unidos y que fue superior general: Un nuevo punto de apoyo. El título del libro, que trata de los nuevos nova bella marianistas para el siglo XXI está basado en esta frase extraordinaria de Chaminade: ¿Qué persona reflexiva no se da cuenta de que las viejas palancas que una vez movieron nuestro mundo moral ahora necesitan de alguna manera otro punto de apoyo? (G.J.Chaminade. Escritos y Palabras I, 154).

La gran fundación de Chaminade fue la «Congregación de la Inmaculada», con sede en la Magdalena de Burdeos. ¿un movimiento seglar? Yo personalmente no lo creo así. Para mí fue un movimiento eclesial global que abarcaba a todo el pueblo de Dios… En la Congregación había seglares jóvenes y adultos, pero también sacerdotes e incluso “religiosos/as” (Los “estados” 2º y 3º). ¡Creó lo que hoy llamamos “Familias espirituales”! Que no es lo mismo que la Familia marianista… Es un paso más…

Los párrocos de Burdeos tras una serie de años contemplando cómo iba expandiéndose esta Congregación nueva, basada en la oración, formación y misión, estaban desconcertados e incluso eran contrarios a estas formas nuevas de Chaminade. Y le escribieron planteándole unas cuantas preguntas. La respuesta de Chaminade, es un texto extraordinario, donde él revela su concepción eclesial, el porqué de esta nueva forma de vivir en la Iglesia. (Respuestas de Chaminade a las objeciones que le hacían las parroquias sobre a la Congregación  (Escritos y Palabras. Vol 1. Nº 153 y 154). He aquí un resumen adaptado de estas respuestas del fundador:

1.- Frente a quienes subrayan las distinciones y rangos, nosotros apostamos por la igualdad. Unión sin confusión. Porque esto es lo evangélico y cristiano

2.- Las clases sociales como división no es lo nuestro. Apostamos para que los más humildes tengan su puesto y su papel. “A menudo se tiene necesidad de alguien más pequeño que uno mismo”

3.- Actuamos de forma nueva porque las nuevas necesidades exigen nuevas respuestas.

4.- Las asambleas públicas las defendemos como un instrumento nuevo de formación, diálogo, dando la voz en la Iglesia a todos

5. Somos congregaciones que tienen a María como modelo y madre, pero no solo para rezarle y celebrar su figura, sino para responder a su palabra “Haced lo que Jesús os diga”. Nuestro movimiento es misionero. Todos lo somos.

6.- Nuestro movimiento no es un gueto, está comprometido con la Iglesia diocesana, animamos las parroquias para que sean ellas también misioneras y no solo sacramentales

7.- Nos resulta difícil que dos tipos de grupos nuestros participen en la Eucaristía dominical de las parroquias: los alejados que se inician en la vuelta a la fe; y los más jóvenes (no son atendidos en ellas).

8.- No estamos de acuerdo con que las parroquias dirijan las congregaciones. Se necesita un líder como el director actual, independiente y con la puerta siempre abierta.

9. Los directores y prefectos de las congregaciones deben tener el apoyo de los obispos, como ocurre con los párrocos, deben ser investidos de una autentica “misio” pastoral.

10. Pero decimos más: “es necesario un hombre que no muera nunca, es decir, una asociación de cristianos que se hayan entregado a Dios para esta obra: para esto ha nacido el “Instituto de María” (Las Hijas de María Inmaculada y la Compañía de María).

El Novum de Chaminade sigue provocándonos para hacer posible eso que dice Dios en el Apocalipsis: ¡Mirad que hago nuevas todas las cosas! (Ap 21,5). La sinodalidad eclesial tiene mucho que ver con esto.

Enrique Aguilera SM