La misión compartida constituye uno de los signos de los tiempos más claros y evidentes del momento eclesial en el que vivimos. La misión compartida se enraíza en la vivencia compartida de nuestro carisma marianista como nuestro particular modo de seguimiento de Jesús. Queremos por tanto no solo compartir misión, sino también vida y sobre todo fe. Os presentamos la comunidad ampliada y los miembros de nuestras fraternidades “enviados” para esta misión tan maravillosa:
Esta comunidad marianista ampliada de laicos y religiosos marianistas se sienten llamados a compartir vida, fe y misión y con las fraternidades de la zona de valencia, asumen el proyecto de parroquia marianista para desarrollar la comunidad parroquial, cuidando especialmente la promoción y la participación de los seglares mediante la integración de la parroquia en la vida y la pastoral de la diócesis en unión con las demás parroquias, sobre todo con las de su entorno. Como comunidad en salida y siguiendo el camino de nuestros fundadores se ocupará de la educación en la fe y la vivencia del carisma marianista, sobre todo el papel de María en la vida de fe, así como las acciones educativas, atendiendo preferentemente a personas y colectivos más desfavorecidos y también de la vinculación con el resto de las parroquias.
Será un lugar donde se vivirá la sinodalidad. Este será también el sitio dónde soñar la parroquia y apoyar este sueño. Este es el lugar donde nos toca construir y esto llegará a todas las estructuras de la parroquia. Un espacio para impulsar un Plan de Acción Parroquial contando con la participación de todas las instancias necesarias, cuidando y haciendo seguimiento y acompañamiento de las personas integradas en la comunidad parroquial, al tiempo que deberá mantener la sostenibilidad de la parroquia garantizando los recursos económicos necesarios en colaboración con la comisión económica de la parroquia.
A nuestros fraternos de la zona de valencia Inés ,Guswil, Lola y Luis, les damos las gracias por su generosidad y amor por la Parroquia SJO. Que Dios os bendiga y os guie en esta gran misión. Sois testimonio vivo de Evangelio.